Pasar al contenido principal
Un sitio oficial del Gobierno de Estados Unidos
English
Enviar por correo electrónico

Un estudio de los NIH indica que el consumo regular de aspirina podría reducir el riesgo de cáncer de ovario

  • Publicación:

Las mujeres que toman aspirina diariamente podrían reducir el riesgo de cáncer de ovario en 20 por ciento, de acuerdo con un estudio realizado por científicos del Instituto Nacional del Cáncer (NCI), el cual forma parte de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH). Sin embargo, es necesario llevar a cabo más investigaciones antes de poder hacer recomendaciones clínicas. El estudio fue publicado el 6 de febrero 2014, en el Journal of the National Cancer Institute.

Se calcula que 22 240 mujeres en Estados Unidos recibirán un diagnóstico de cáncer de ovario en 2014 y 14 030 morirán por la enfermedad. El cáncer de ovario en estadio inicial puede tratarse con éxito. No obstante, debido a que los síntomas asociados al cáncer de ovario pueden ser similares a los de otras afecciones comunes, como los trastornos digestivos y de vejiga, el diagnóstico, con frecuencia, no se determina sino hasta que la enfermedad ya está avanzada. El cáncer de ovario en estadio avanzado tiene un mal pronóstico y las opciones de tratamiento son limitadas. Es por ello que las estrategias de prevención pueden ser de gran importancia en el control de esta enfermedad.

Se ha comprobado que la inflamación crónica o persistente aumenta el riesgo de cáncer y de otras enfermedades. Según se desprende de estudios anteriores, las propiedades antinflamatorias de la aspirina y los medicamentos antinflamatorios no esteroides (AINE) sin aspirina podrían reducir el riesgo de cáncer en general. Sin embargo, los estudios que examinan si el uso de estos medicamentos puede influir en el riesgo de cáncer de ovario han arrojado resultados en su mayor parte inconclusos. Este es el estudio más grande realizado hasta la fecha para evaluar la relación entre estos fármacos y el riesgo de cáncer de ovario.

Los doctores Britton Trabert y Nicolas Wentzensen, de la División de Epidemiología y Genética del Cáncer del NCI, y sus colegas, analizaron los datos recogidos en 12 estudios epidemiológicos de gran volumen a fin de investigar si las mujeres que tomaron aspirina, medicamentos antinflamatorios no esteroides (AINE) sin aspirina o acetaminofeno presentaban un riesgo menor de cáncer de ovario. Estos 12 estudios (nueve de ellos realizados en Estados Unidos) fueron parte del Consorcio de la Asociación de Cáncer de Ovario (Ovarian Cancer Association Consortium). Los científicos evaluaron los beneficios de estos fármacos en aproximadamente 8 000 mujeres con cáncer de ovario y cerca de 12 000 mujeres que no tenían la enfermedad.

Entre las participantes del estudio que dijeron haber tomado o no aspirina con regularidad: 18 por ciento consumió aspirina, 24 por ciento consumió medicamentos antinflamatorios no esteroides (AINE) sin aspirina y 16 por ciento tomó acetaminofeno. Los investigadores determinaron que las participantes que dijeron haber consumido aspirina diariamente presentaron un riesgo de cáncer de ovario 20 por ciento menor que las que habían tomado aspirina menos de una vez por semana. Las conclusiones no fueron tan claras con respecto a los medicamentos AINE sin aspirina, entre los que se incluye una gran variedad de fármacos. En este caso, los científicos observaron un riesgo de cáncer de ovario 10 por ciento más bajo en las mujeres que tomaron medicamentos AINE al menos una vez por semana, en comparación con aquellas que consumieron este tipo de fármacos con menor frecuencia. No obstante, este resultado no estuvo dentro de un rango estadísticamente significativo. En contraste a los resultados sobre la aspirina y los medicamentos AINE, el consumo de acetaminofeno (que no es un fármaco antinflamatorio) no se asoció a una reducción del riesgo de cáncer de ovario.

El enfoque de este estudio se suma a una lista creciente que incluye otros tumores malignos, como el cáncer colorrectal y otros cánceres, que parecen tener la posibilidad de prevenirse mediante el consumo de aspirina. "Nuestro estudio permite suponer que los tratamientos con aspirina, que tienen un efecto comprobado de proteger contra el ataque al corazón, también podrían reducir el riesgo de cáncer de ovario. Si bien los resultados son de gran interés, no deberían influir la práctica clínica actual. Es preciso realizar más estudios para analizar el delicado equilibrio entre riesgos y beneficios de este fármaco con posibles propiedades quimiopreventivas, así como otros estudios para identificar el mecanismo por el cual la aspirina podría reducir el riesgo de cáncer de ovario", dijo Trabert.

Los efectos adversos del consumo diario de aspirina son, entre otros, hemorragia digestiva alta y accidente cerebrovascular hemorrágico. Por consiguiente, los científicos advierten que el tratamiento diario con aspirina solo debe llevarse a cabo con la aprobación de un médico.

# # #

Bibliografía: B Trabert, et al. Aspirin, non-aspirin NSAID, and acetaminophen use and risk of invasive epithelial ovarian cancer: a pooled analysis in the Ovarian Cancer Association Consortium. JNCI. February 6, 2014. DOI: 10.1093/jnci/djt431.